A un año de la salida de la Vendée, ¿Qué aprendimos de la Transat Jacques Vabre?
Todos los IMOCA ya están en Salvador de Bahía. Los barcos llegaron, más o menos, a un año de la salida de la Vendée Globe 2020 por tanto, ¿se puede aprender algo de esta oportuna edición del clásico bianual cruce transatlántico de Le Havre a Salvador?
Algunos favoritos emergen entre la flota, otros terminan decepcionados. Unos consolidan su status en la Vendée con la totalidad de las millas clasificatorias navegadas y otros ven comprometida su participación en la regata debido a los daños sufridos. En general, esto es un buen momento para examinar la flota antes de un invierno de preparación para las dos próximas regatas de la Globe Series, la Transat CIC y la New York-Vendée en la primavera del 2020. Algunos estarán contentos con su trabajo y su aprendizaje en la Transat Jacques Vabre, pero para la mayoría esa es precisamente la medida de hasta donde tienen que llegar.
Una regata dividida en varias partes
La primera parte de la regata estuvo dominada por el Charal de los co-patrones Jérémie Beyou y Christopher Pratt. Pero los Doldrums resultaron inusualmente complicados y Beyou y Pratt vieron tristemente como su ventaja de 100 millas sobre el Apivia de Dalin y Elies se evaporaba en el calor sofocante de la Zona de Convergencia Intertropical. Cuando quedaron atrapados en la zona de vientos ligeros, variables e inestables, la puerta del hemisferio sur se abrió para Charlie Dalin y Yann Elies, quienes tuvieron la suerte de escapar y empezar a construir rápidamente una gran ventaja.
El rendimiento casi perfecto del Apivia puso en valor la alta calidad de la preparación del equipo MerConcept. Para Dalin, su primera regata oceánica con el nuevo diseño de Verdier llega en un momento en que los IMOCA recién botados son cada vez más complejos y requieren una preparación cada vez más sofisticada. Otro IMOCA recién botado y que impresionó fue el nuevo diseño Verdier, Advens for Cybersecurity, de Thomas Ruyant y Antoine Koch. A pesar de una parada en Cherburgo al comienzo de la regata para reparar un fallo del piloto automático, Ruyant y Koch se recuperaron para terminar en quinto lugar, superando a casi toda la flota.
Kevin Escoffier navegando en el PRB con el actual ganador de la Solitaire, Nicolas Lunven, demostró el gran potencial del PRB – IMOCA diseñado por VPLP-Verdier para la Vendée Globe del 2012 -, finalizando la regata en segundo lugar; al igual que Sam Davies y Paul Meilhat a bordo del Initiatives Coeur en el séptimo lugar. Incluso si no están en la línea de salida de la próxima Vendée Globe, vale la pena destacar el excelente rendimiento del 11 Hour Racing (ex Hugo Boss) navegado por el estadounidense Charlie Enright – que está montando un equipo de cara a la próxima The Ocean Race – y por el experimentado Pascal Bidégorry, que finalizó cuarto. Fabrice Amedeo y Eric Peron (Newrest Arts & Fenêtres) terminaron finalmente en el noveno lugar, una recompensa a su sensata y conservadora regata.
Esta vez, el Oeste cobró un precio muy alto
Antes de la salida, la gran pregunta era si ir hacia el oeste, sortear el anticiclón y entrar antes en los vientos favorables o quedarse al sur de la baja, por la costa portuguesa donde los vientos alisios parecían garantizados. Esta vez la opción del oeste no funcionó. Las bajas presiones se desviaron y el anticiclón de las Azores se desplazó de su posición habitual, haciendo que la ruta del sur por el este resultase ser la más rentable. De hecho, aquellos que tomaron la opción oeste al final decidieron regresar con el paquete principal que se había quedado al este, a costa de perder muchas millas y navegar una mayor distancia. Louis Burton y Davy Beaudart (Bureau Vallée 2), Yannick Bestaven y Roland Jourdain (Maître CoQ), Arnaud Boissières y Xavier Macaire (La Mie Câline – Artisans Artipôle), Alan Roura y Sébastien Audigane (La Fabrique), Stéphane Le Diraison y François Guiffant (Time for Oceans), Boris Herrmann y Will Harris (Malizia 2 – Yacht Club de Mónaco) y Giancarlo Pedote y Anthony Marchand (Grupo Prysmian) pagaron un precio muy alto por irse al oeste.
Tres equipos tuvieron que abandonar la regata. Clément Giraud y Rémi Beauvais (Fortil) no pudieron comenzar debido a un incendio a bordo antes de la salida. Isabelle Joschke y Morgan Lagravière (MACSF) dañaron la quilla cuando vararon justo después de la salida, teniendo que retirarse hacia Lorient. Alex Thomson y Neal Mac Donald (Hugo Boss) colisionaron con un OFNI (Objeto Flotante No Identificado) en las Canarias y dañaron gravemente el sistema de la quilla de su nuevo IMOCA. Después de soltar la quilla, la tripulación tuvo que navegar el barco sin quilla unas 800 millas hasta Mindelo, en las islas de Cabo Verde. Pese a todo, el equipo británico tiene un gran proyecto por delante. Pero de los tres, la peor parada fue Isabelle Joschke, porque tampoco terminó la Route du Rhum del año pasado y en su carrera para la adquisición de millas navegadas para la próxima Vendée, ella y Giraud son los últimos en la clasificación.
Sébastien Simon y Vincent Riou (Arkéa-Paprec) realmente lucharon y tienen lecciones que aprender después de romper dos foils, uno antes de la salida. Y Giancarlo Pedote a bordo del Prysmian Group tendrá que analizar por qué se rompió uno de sus foils.
La regata dentro de la regata: los barcos con orzas rectas
Aunque el mejor de los IMOCA sin foils demostró ser competitivo desde la misma salida de la Transat Jacques Vabre en cuanto a la velocidad bruta, no pudieron igualarse a los nuevos barcos con foils.
El Banque Populaire X de Armel Le Cléac’h y Clarisse Crémer acabaron cediendo en los últimos días y fueron sextos. Por detrás de ellos, Jean le Cam y Nicolas Troussel (Corum l’Epargne) estaban en el puesto 13 por delante de Damien Seguin y Yoann Richomme (Grupo Apicil). El Pure (Romain Attanasio – Sébastien Marsset) y el V and B – Mayenne (Maxime Sorel – Guillaume Le Brec) finalizaron pocas horas después. Hay que destacar el puesto 20 de Benjamin Dutreux y Thomas Cardrin (Water Family), considerando que tuvieron muy poco tiempo para prepararse.
Sin embargo, les resultó mucho más difícil a los IMOCA de generaciones anteriores presentar batalla, como el Campagne de France (Miranda Merron Halvard Mabire), el Pip Hare Ocean Racing (Pip Hare – Ysbrandt Endt), el Ariel 2 (Ari Huusela – Michael Ferguson) y el Vers un Monde sans SIDA (Erik Nigon – Tolga Pamir).
La carrera por las millas sigue siendo relevante
De los 37 candidatos para la próxima Vendée Globe, 18 tienen asegurado un lugar en la línea de salida: los propietarios de un barco nuevo que no han completado la Route du Rhum pero que han completado un curso de calificación y los competidores que terminaron la última Vendée Globe.
Para otros, la carrera por las millas clasificatorias continúa. Cinco patrones tienen suficientes millas para garantizar que no los apeen de la lista otros regatistas. Boris Herrmann, Manuel Cousin (Groupe Setin), Stéphane Le Diraison (Time for Oceans), Alexia Barrier (4myplanet) y Damien Seguin (Groupe Apicil) pueden esperar con cierta certeza la primavera de 2020. Para los demás, los dos cruces transatlánticos serán la clave para ver quién puede ser uno de los treinta y cuatro participantes de la próxima Vendée Globe. Por tanto, para los regatistas que desean probar sus máquinas antes de la salida de la vuelta al mundo en solitario en el mes de noviembre y para aquellos que ahora necesitan terminar estas dos regatas, las próximas dos regatas de la IMOCA Globe Series prometen ser fascinantes.
Saludos y buenos vientos
0 Comments