La Transquadra y la Barcelona World Race ejes del coloquio sobre la vela oceánica a dos.

Los patrones de la Barcelona World Race, Anna Corbella y Pepe Ribes, y los de Transquadra, Guillermo Durán, Antoni Nicolau, Marc Mateu y Jordi Mateu han dialogado con representantes de los medios de comunicación de toda España en un coloquio sobre la navegación oceánica a dos celebrado en el Real Club Náutico de Barcelona. El contraste de los regatistas profesionales y los aficionados ha enriquecido el debate proporcionando nuevas formas de ver el reto de la navegación oceánica a dos.

Mesa redonda © Mireia Perelló / FNOB

Convocado por la FNOB, organizadora de la Barcelona World Race, el coloquio se desarrolló tras un almuerzo al principio del cual el representante de la Transquadra, Mico Bolo, presentó la célebre regata que se organiza cada tres años y que en la anterior edición de 2011 incorporó por vez primera la etapa desde Barcelona hasta Madeira. De este modo, la regata tiene dos salidas: la de Saint-Nazaire, que agrupa a la flota atlántica, y la de Barcelona, que se nutre de regatistas mediterráneos. La próxima edición de la que se define como la “transatlántica de los aficionados de 40 años” zarpará de Barcelona el 23 de julio de 2014. Bolo señaló la importancia que Barcelona tiene en el desarrollo futuro de la Transquadra: «La incorporación de Barcelona en la primera etapa nos ha permitido incluir en la regata un buen número de navegantes mediterráneos. Esperamos tener unos 30 barcos en la salida de al próxima edición en Barcelona, en julio de 2014.»

Aficionados frente a profesionales en un coloquio rico en contrastes.

El coloquio entre los navegantes y los representantes de los medios de comunicación fue moderado por Víctor Lavagnini y María Bertrán, y se basó en varios ejes temáticos relacionados con la navegación oceánica a dos, una modalidad de competición que ha recibido un notable impulso los últimos años en la Clase IMOCA gracias a la celebración de la Barcelona World Race, la primera vuelta al mundo a dos sin escalas.

Mesa redonda © Mireia Perelló / FNOB

Los regatistas de la Transquadra manifestaron en primer lugar su admiración por la presión y responsabilidad de los profesionales de la Barcelona World Race. Dirigiéndose a Pepe y Anna, Marc Mateu manifestó: «Nosotros navegamos pensando mucho en la Barcelona World Race, admiramos de vosotros que podáis navegar bajo la presión de tener que rendir siempre al máximo.» A lo que Pepe Ribes respondió: «Trabajar bajo presión es mi profesión, esta exigencia la llevo en las venas; estoy acostumbrado desde siempre, aunque también vengo del mundo de las regatas de aficionados. Pero tengo la suerte de que trabajo en lo que es mi pasión.»

El coloquio abarcó un amplio abanico de temas y mostró la riqueza que supone la navegación a dos como experiencia deportiva, técnica y humana. Los navegantes participantes respondían a varios de los diferentes modelos de complementariedad que se dan en las parejas oceánicas. Guillermo Durán y Antoni Nicolau, son dos navegantes solitarios que habían navegado muy poco en doble y encontraron la experiencia de la Transquadra muy enriquecedora. Ambos coincidieron en que la Barcelona World Race había sido un referente : «Navegar en solitario es diferente después de haber atravesado el Atlántico a dos – comentó Antoni – la experiencia ha sido magnífica. Además hemos podido aplicar estrategias y técnicas que estudiamos siguiendo la Barcelona World Race, y muy en especial participando en el juego virtual.» Guillermo por su parte mostró su admiración por Pepe y Anna y se declaró un ferviente seguidor de la regata: «Estuve en el mar en las dos salidas de 2007 y 2010. Imaginaba que algún día podría hacer algo así. En la Transquadra me he sentido un poco más próximo.»

Este tema llevó a situar la navegación a dos en su dimensión deportiva entre la navegación en solitario y con tripulación. Jordi Mateu señaló que la experiencia con su hermano Marc no le había sorprendido [son hermanos gemelos], pues se conocen a la perfección, aunque confiesa que él es menos competitivo. Ninguno de los patrones de la Transquadra manifestó haberse sentido presionado por el compañero, aunque Guillermo reconoció que en solitario navegaba más aliviado, por lo menos por lo que respecta a la gestión del sueño: «En solitario duermo cuando quiero; a dos estoy sujeto por las guardias y al final acumulé sueño atrasado.» Anna Corbella compartió su opinión: «Sí, en solitario duermes mejor. A dos estás sujeta también al ritmo y la forma de hacer de tu compañero. Yo tuve suerte de que con Dee Caffari nos llevamos de maravilla y ella sabía muy bien el tipo de esfuerzo que requería cada maniobra.»

Pepe Ribes, que llegó al mundo de la navegación a dos proveniente de los equipos con tripulación de la Volvo Ocean Race explicó con claridad las diferencias de presión: «Con tripulación, cuando entras en tu guardia estás presionado por tus cuatro compañeros. No puedes bajar el ritmo del grupo. A dos, en la Barcelona World Race, es muy distinto. Cuando relevas a tu compañero estás solo, pero tienes mucha mayor responsabilidad: tienes que saber hacer lo que en la Volvo hacen tus compañeros de guardia y además llevar la táctica y estudiar la meteo. La experiencia de la Barcelona World Race me ha permitido aprender muchas cosas valiosas, como, por ejemplo, la meteo y esto ha sido muy importante para mí.»

Los periodistas asistentes intervinieron activamente en el coloquio y se debatieron algunas ideas sobre cómo mejorar la difusión de la vela oceánica en los medios de comunicación españoles y de la necesidad de crear más regatas como la Transquadra que proporcionen un escalafón para que los aficionados, sobre todo los más jóvenes, puedan acceder a las regatas oceánicas de elite. El coloquio concluyó con la firme decisión de repetir el modelo, que los asistentes valoraron con satisfacción, con otros temas relacionados con la regata oceánica.

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