En los últimos cinco días, el Océano Índico ha ofrecido un mundo de contrastes a Francis Joyon y su tripulación a bordo del maxi trimarán IDEC SPORT. Si bien han mantenido un ritmo de récord con una velocidad media de 23 nudos en las 5000 millas navegadas, el viaje ha resultado incómodo, más si cabe durante este pasado fin de semana, cuando pasaron por el sur de dos sistemas de bajas presiones muy activos que se desplazaron gradualmente al este de Madagascar. La lluvia, la visibilidad reducida, los vientos violentos y una fuerte marejada del norte sacudieron a la tripulación y castigaron al trimarán. Pese a ello, el IDEC SPORT ha logrado mantenerse a más de 600 millas por delante del barco que tiene el récord de la Ruta del Té, el trimarán de 70 pies, Maserati, que fue muy rápido en esta parte del curso. Aún quedan algunas dificultades importantes para Francis y sus hombres, antes de que doblen el Cabo de Buena Esperanza y regresen al Atlántico Sur con una serie de estratégicas trasluchadas con las que tendrán que lidiar en unas condiciones extremadamente variables con los sistemas de bajas presiones moviéndose desde el oeste y algunas zonas de altas presiones.

La driza de la vela mayor rota …

«Ahora mismo no estamos navegando a tope«, explicaba Francis Joyon esta mañana. “Los mares todavía están agitados y nos están frenando y desde ayer hemos estado navegando con dos rizos después de que se rompiera la driza de la vela mayor. Los mares todavía son demasiado pesados para que podamos trabajar de forma segura en el mástil por lo que vamos a esperar hasta mañana por la mañana, cuando esto se calme un poco».

«Lamentablemente, el viento en las próximas horas caerá por los que los dos rizos en la mayor nos afectarán en la velocidad». Sin embargo, Joyon y sus hombres no están particularmente preocupados. Han pasado nueve días desde que salieron de Hong Kong y tienen una ventaja cómoda sobre el récord, aproximadamente el equivalente a un día de navegación.

El Cabo de Buena Esperanza, a 5 o 6 días.

El Océano Índico continúa mostrando su lado salvaje con sistemas de bajas presiones muy activos y vastas áreas de altas presiones en el extremo sur. Joyon tiene que encontrar su camino y virar en el momento adecuado a medida que se acerca a la zona de transición. El maxi trimarán continuará su ruta hacia el sur durante unas horas más mientras esperan a los vientos del noroeste antes de entrar en zonas más calmas. Joyon y sus hombres van a tener que repetir esta maniobra varias veces antes de llegar al complicado paso del Cabo de Buena Esperanza. Deberían ser capaces de mantener la ventaja que poseen navegando a una velocidad aceptable.

Saludos y buenos vientos