Mark Turner: «La proximidad de los barcos a tierra siempre ha sido un ingrediente clave de las Series y continuará siéndolo».

Desde sus humildes comienzos, siendo solo un equipo de seis personas trabajando en un apartamento en la ciudad costera de Cowes, Mark Turner, Presidente Ejecutivo de OC Sport, ha creado un imperio. Gracias a su visión clara para la innovación, a empujar hasta forzar los límites establecidos y a no dormirse en los laureles, ha conseguido cambiar la forma de ver las regatas de vela. En esta corta entrevista nos cuenta lo que fueron estos excepcionales nueve años de las Extreme Sailing Series™.

«Estoy muy orgulloso de estar entrando en nuestra décima temporada. Mirando hacia atrás, empezamos en el 2007 con cuatro barcos y cuatro sedes, sólo en Europa, y desde ahí, hemos continuado rompiendo con las regatas tal y como se conocían e innovando en los barcos. Las Extreme Sailing Series™ han sido, sin lugar a dudas, el catalizador de una gran cantidad de cambios en este deporte. Incluso ahora con los foils, adoptando para este año 2016 el uso de los GC32; unos barcos que, probablemente, no habrían visto la luz del sol si las Series no hubieran llevado por el mundo las regatas de multicascos haciéndolas creíbles y accesibles fuera de Francia, lugar donde fueron aceptadas durante décadas.

Hemos hecho el deporte más accesible y atractivo al acercar la vela a los aficionados y crear la figura de los invitados a bordo, desde una perspectiva de patrocinio, una parte fundamental en cualquier evento profesional de vela. Utilizamos barcos de colores – a diferencia de un montón de velas blancas – corremos en unas plataformas que aceleran y que hacen cosas que las personas que no son marineras pueden entender, comentar y disfrutar haciendo fotos o tomando videos.

Con el paso de los años he visto muchas modas e ideas que van y vienen. Pero la única cosa que he visto y que se ha apoderado de todo un deporte -como es la vela-, es la de alguien tratando de hacer que un Láser navegue con foils como los kiteboarders o los surfboarders e incluso personas tratando de remar en un hidropedal con foils. Ha sido una revolución. Es una nueva dinámica de la velocidad y creo que teníamos que llegar a eso. No estamos liderando este aspecto, pero vamos a ser capaces de introducirlo en un circuito profesional líder a nivel mundial. Creo que nos va a dar frescura y que va a ser un nuevo capítulo en la historia del evento.

También es un nuevo reto tanto para los regatistas como para los gestores del evento sin comprometer nuestros valores fundamentales, ya que tenemos que aprender a gestionar la delgada línea entre lo que es espectacular y lo que es seguro. Hay un delicado equilibrio entre todos estos elementos que hemos sabido mantener muy bien estos últimos 10 años gracias a Phil Lawrence, el mejor director de carrera posible.

Va a ser todo un desafío donde, además, los foils van a añadir un aspecto muy particular a las regatas. Una pequeña diferencia en la velocidad del viento o en su dirección puede generar una diferencia muy grande en la velocidad del barco, del orden de 10 nudos arriba o abajo casi instantáneamente. Ese será uno de los elementos más exigentes para la gestión, además de que será una de las características más espectaculares de las regatas con las que disfrutará el público.

La proximidad de los barcos a tierra siempre ha sido un ingrediente clave de las Series y continuará siéndolo. Un barco de vela a 800 metros de distancia no resulta tan impresionante, independientemente del tipo de barco del que se trate. A esa distancia no se siente la velocidad. Pero cuando un barco se encuentra a 10 metros de distancia, ahí si resulta muy impresionante. Por eso, es tan importante la proximidad y eso es algo que en otros eventos tal vez no se entiende. Soy gran fan del aspecto visual y aunque podemos perder un poco con los cascos de los barcos levantados hasta 30 grados por encima del agua, será fácilmente compensado por la aceleración que van a dar los foils y por el hecho de que va a suceder todo muy cerca de espectadores».

Saludos y buenos vientos.