«Por fin!», exclamó Lionel cuando pisó tierra firme después de pasar 10 días a bordo del trimarán volcado y cinco días más a bordo del remolcador de rescate. «Desde el pasado viernes el avance del remolcador era de apenas 6 nudos de velocidad media. Fue un trayecto bastante monótono. Solo en las últimas 48 horas hubo algún trabajo que hacer ya que uno de los miembros del equipo técnico y yo pasamos a la plataforma del trimarán para instalar una luz de posición encendida permanentemente para prevenir cualquier incidente imprevisto debido al intenso tráfico marítimo que hay en la aproximación a la costa de Rio de Janeiro», comentó Lemonchois.

En los próximos días, el equipo desmontará el trimarán para enviarlo en mercante al astillero en Francia para las reparaciones. «Vamos desmontar todo lo que sea posible, incluso todos los equipos de a bordo para enviarlos a Lorient».

El patrón está determinado a prepararse para su próximo desafío, la Route du Rhum. «Desde hace días ya estoy concentrado en el nuevo proyecto. Ya estamos analizando el perfil del nuevo mástil. No podemos perder tiempo, tenemos que estar listos para la salida de la Route du Rhum el próximo 2 de noviembre».

Saludosy buenos vientos