Morgan Lagravière estará volando por el océano con los colores de Safran hasta finales de junio de 2017 y, durante los últimos meses de esta asociación, el joven navegante continuará con su desarrollo, acumulando experiencia junto a su entrenador, Roland Jourdain.

Después de su viaje de entrega desde Ciudad del Cabo, el monocasco Safran regresó al astillero de Concarneau, a las instalaciones de Kaïros, para una revisión completa. Está previsto que regrese al agua a mediados de marzo.

Para Morgan Lagravière, estos próximos meses son la oportunidad de completar su educación, sobre todo con algunas salidas largas en mar abierto, navegando a dos manos y luego en solitario. «Todavía tengo que seguir creciendo como navegante», dice. «Ya en frio, haciendo balance de mis cuatro semanas de regata en la Vendée Globe, creo que tengo que aprender a dominar todo el potencial de esta máquina realmente increíble. Mi deseo es estar en la línea de salida de la próxima edición, en 2020, y esa esla razón de la elección de un programa de navegación marítima de este tipo. La programación de las sesiones de formación durante este período me permitirán entrenar bajo las condiciones de una regata oceánica».

Lagravière participará en varias regatas de pretemporada: el Tour de Belle-Île, el Grand Prix Guyader en Douarnenez y el Ar Men Race, empezando por La Trinité-sur-Mer. Tres desafíos que demostrarán de nuevo el pleno potencial de los 60 pies del Safran…

Saludos y buenos vientos